Santiago
DespuĂ©s de una jornada de hacer mil y una cosas, pero nada en partĂcular muy importante, era el momento de ir a sus casas, pero ese dĂa decidieron no tomar el bus como de costumbre, sino que decidieron caminar, asĂ de simple. Una de ellas simplemente no podĂa parar de mirar a la otra; era costumbre en realidad. En varias ocasiones gente las habĂa mirado feo, gritado cosas, y hasta mirado con lujurĂa, sin embargo ella nunca se enterĂł porque no podĂa despegar su mirada de la otra, o simplemente no podĂa dejar de creer que habĂa un mundo creado por ella en donde solo caĂan las dos. Hablaron de historias, de comics, de dibujos, flores y el calor; más adelante incluso hablaron de Argentina. A veces se cambiaban las posiciones: de la mano, tomadas de la cintura, o de un dedo; era un camino conocido para las dos, pero hacerlo de esta manera era distinto.
En un momento se soltaron, para una de ellas fue eterno. Se habĂa acostumbrado a esa compañĂa directa, el tener a alguien al lado, y no podĂa parar de pensar en las cosas que habĂa hecho mal en ese corto rato. Nada habĂa hecho mal, pero esa inseguridad brotaba en ella en situaciones como estas, simples, pero especiales. Luego de un momento, y al cruzar una calle peligrosa, se juntaron de nuevo. Estaba feliz ahora, muy, pero aĂşn se snetĂa insegura, por lo que decidiĂł mirar hacia al frente. Era raro de hecho, nunca lo hacĂa, y se dio cuenta en ese momento, pero siguiĂł haciĂ©ndolo.
Al tener esta nueva visual, y mientras hablaban de la vida, vio como otras dos chicas que iban separadas se tomaron de la mano. ¿Habrá sido al verlas a ellas o solo fue casualidad?. Se quedĂł pensando en eso unos segundos, hasta que dejĂł de darle importancia, las habrán visto solo un par de segundos, por lo que de seguro no habĂa sido influencia suya en nada. Pero al pasar de los minutos otras dos chicas, una vestida con negro y otra con gris hicieron un contacto visual con ella para proceder a tomarse de las manos. En ese momento se sitiĂł muy consciente de ella misma. ¿QuĂ© pasaba si alguien que la conocĂa la veĂa? ¿QuĂ© pensaran los demás? ¿Estaba bien lo que estaba haciendo, lo que estaba sintiendo o estaba, como solĂa hacerlo, confundiĂ©ndolo todo y dejándose llevar por lo que parecĂa ser todo a primera vista? Al parecer esas preguntas en su cabeza rondaron por algunos segundos por lo que no se dio cuenta que caminaron un par de cuadras en silencio o haciendo comentarios sobre la calle principal en la que iban. Al final nada importaba se dijo, y sintiĂł la mano de la otra enredada con la suya, se sentĂa bien y eso era todo lo que importaba ¿verdad?.
Estaban llegando al punto en el que debĂan separarse, pero no querĂa separarse de la otra, pero no sabĂa que escusa inventar para estar más tiempo con ella. ¿Y si tomaban once o iban a la plaza a descansar? ¿Muy obvio, muy comĂşn o muy desconsiderado?
Pero, por cosas del destino, habĂa una marcha frente a ellas. Estuvieron mucho rato pensando que hacer, más considerando que para una de ellas el tránsito estaba cortado.
-¿QuĂ© hacemos?
-No sé...
-¿Vamos?
-Ya, bueno
Al parecer aĂşn habĂan ganas de caminar.
ME DA MUCHA PLANCHA ESCRIBIR ESTO PERO PUCHA HERE I AM
HAHAHHAA POR QUÉ SOY TAN RIDÍCULA SEÑOR JESÚS!!!!!!!!!!!!!!
En un momento se soltaron, para una de ellas fue eterno. Se habĂa acostumbrado a esa compañĂa directa, el tener a alguien al lado, y no podĂa parar de pensar en las cosas que habĂa hecho mal en ese corto rato. Nada habĂa hecho mal, pero esa inseguridad brotaba en ella en situaciones como estas, simples, pero especiales. Luego de un momento, y al cruzar una calle peligrosa, se juntaron de nuevo. Estaba feliz ahora, muy, pero aĂşn se snetĂa insegura, por lo que decidiĂł mirar hacia al frente. Era raro de hecho, nunca lo hacĂa, y se dio cuenta en ese momento, pero siguiĂł haciĂ©ndolo.
Al tener esta nueva visual, y mientras hablaban de la vida, vio como otras dos chicas que iban separadas se tomaron de la mano. ¿Habrá sido al verlas a ellas o solo fue casualidad?. Se quedĂł pensando en eso unos segundos, hasta que dejĂł de darle importancia, las habrán visto solo un par de segundos, por lo que de seguro no habĂa sido influencia suya en nada. Pero al pasar de los minutos otras dos chicas, una vestida con negro y otra con gris hicieron un contacto visual con ella para proceder a tomarse de las manos. En ese momento se sitiĂł muy consciente de ella misma. ¿QuĂ© pasaba si alguien que la conocĂa la veĂa? ¿QuĂ© pensaran los demás? ¿Estaba bien lo que estaba haciendo, lo que estaba sintiendo o estaba, como solĂa hacerlo, confundiĂ©ndolo todo y dejándose llevar por lo que parecĂa ser todo a primera vista? Al parecer esas preguntas en su cabeza rondaron por algunos segundos por lo que no se dio cuenta que caminaron un par de cuadras en silencio o haciendo comentarios sobre la calle principal en la que iban. Al final nada importaba se dijo, y sintiĂł la mano de la otra enredada con la suya, se sentĂa bien y eso era todo lo que importaba ¿verdad?.
Estaban llegando al punto en el que debĂan separarse, pero no querĂa separarse de la otra, pero no sabĂa que escusa inventar para estar más tiempo con ella. ¿Y si tomaban once o iban a la plaza a descansar? ¿Muy obvio, muy comĂşn o muy desconsiderado?
Pero, por cosas del destino, habĂa una marcha frente a ellas. Estuvieron mucho rato pensando que hacer, más considerando que para una de ellas el tránsito estaba cortado.
-¿QuĂ© hacemos?
-No sé...
-¿Vamos?
-Ya, bueno
Al parecer aĂşn habĂan ganas de caminar.
ME DA MUCHA PLANCHA ESCRIBIR ESTO PERO PUCHA HERE I AM
HAHAHHAA POR QUÉ SOY TAN RIDÍCULA SEÑOR JESÚS!!!!!!!!!!!!!!
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